Inspiración

Siempre fue raro mi vínculo con la sexualidad. Desde mis primeros encuentros, sentía que la coreografía que veía en el porno lejos estaba de satisfacerme. Sentía que tenía que haber algo más ahí. Así fue que tan chico, a los 18, ya estaba leyendo libros y libros de Tantra, que se transformaron en experiencias con distintos maestros.

Así fui descubriendo que mi modo singular del placer era muy distinto al que había visto por ahí, a ese que la cultura nos quiere vender a toda costa -para que sigamos sin descubrir nuestra tendencia erótica elemental, para que sigamos buscando ese placer que nunca alcanzamos.

El Tantra nos invita a descubrir y explorar consciente y deshinibidamente nuestro modo singular de gozar y de encontrarnos. Reconociendo cada posibilidad como sagrada -y potencialmente deliciosa.

Generamos un contexto cuidado y amoroso, donde acompañar también las resistencias y los dolores asentados en el cuerpo, tras tantos años de adoctrinamiento de nuestra sexualidad.

No estás tan equivocadx como creías,
todas tus fantasías, tus deseos, tus miedos, todo es absolutamente válido,
sagrado
y potencialmente delicioso.

Si…

…querés descubrir la danza auténtica de tu sexualidad, despojándola de mandatos heredados

…buscás establecer vínculos profundos y transformadores

…te interesa aprender más acerca de la sexualidad humana

…querés descubrir el camino que el Tantra tiene para ofrecerte

…esta jornada es para vos.

¡Con el corazón abierto te esperamos!

¿Qué te va a aportar esta jornada?

Nuestra energía sexual es la fuente ancestral de nuestro poder creador, nuestro goce y nuestra capacidad de contacto profundo con otras criaturas humanas y con la totalidad de la existencia. Pero todo esto ha quedado velado por los mandatos e imágenes que condicionan nuestra sexualidad.

Esta jornada es una invitación a recuperar esta fuente ancestral, que permanece viva en la carne íntima de nuestros cuerpos habitados.
Un espacio donde reconocer amablemente todos estos condicionamientos, que se han transformado en hábitos, y abrirnos a explorar  las distintas texturas de nuestra energía sexual:

su potencial y sus limitaciones, para recuperarnos en la belleza y profundidad de nuestro ser sexuado.

Nos interesa despojarnos de las imágenes que cargamos fijas en los cuerpos, condicionando la experiencia.
Abrir el espacio de lo auténtico de cada encuentro,
donde los cuerpos pueden vibrar de intenso misterio
deshaciendo lo heredado en la potencia del contacto.

No hay una receta, un camino, una lista de tips.

Hay un misterio que en la intensidad del erotismo comienza a sacudir y conmover las corazas,
hay una sexualidad negra, que libera la salvaje vitalidad de nuestros cuerpos,
una sexualidad roja, donde la pasión de la carne puede manifestarse en la potencia de una respiración,
hay una sexualidad blanca, donde nuestros pecados se evaporan en el amor de criaturas encarnadas.

En estos tres ejes, recorremos con inocencia y profundidad la totalidad de la sexualidad que nos constituye.

Para desandar estos milenios de condicionamientos
y recuperar una sexualidad espontánea y ecológica,
basada en la escucha del cuerpo vincular que juntxs vamos co-creando.

Y descubrir que todo en nuestra sexualidad es sagrado.

A través de una serie de prácticas de respiración, movimiento y contacto que el antiguo Tantra nos ha legado
habilitamos una exploración capaz de transformar los patrones vinculares inscriptos en los cuerpos
y abrir todo un nuevo campo de posibilidades para la energía sexual en vos.

Si tu cuerpo vibra ante este llamado
te esperamos,
este es el lugar que estabas esperando.

Abordaje y enfoque terapéutico

¿Qué nos pasa cuando la vitalidad y el placer aparecen en nuestras vidas? ¿Podemos abrirnos a la experiencia de goce? ¿Y al encuentro con otrxs? ¿Qué miedos o resistencias aparecen? ¿Necesitamos agotar la experiencia, salirnos de la escena, acabar con la energía que circula?

Nuestra propuesta es aprender a quedarnos, a observar y no hacer nada más que estar ahí, con todo eso, recibiéndonos unxs a otrxs. La intención no es buscar algo predefinido, sino abrir un espacio amoroso donde encontrarnos con esto que hoy somos. No se trata de nada más que de reconocernos justo acá, con nuestras limitaciones y nuestras potencialidades, nuestras vulnerabilidades y nuestros deseos. Reconocernos en la totalidad del ser humano que hoy somos.

Ofrecemos un espacio donde, por un lado, acompañar las heridas y mandatos instalados en el cuerpo, dándole un espacio donde ser sentidos y recibidos. Y, en simultáneo, ir abriendo el mapa hacia nuevas exploraciones, que contengan y amplifiquen nuestro modo singular de gozar.

Iremos acompañando esta exploración desde la palabra y la presencia.
Habrá dinámicas individuales, grupales y en duplas.

No hay prácticas de sexo explícito.