Presentamos este apartado donde permitirnos tomar la guía que el cielo nos ofrece, semana a semana.
Vida cotidiana
En estos días mucha gente, incluyéndome, me viene nombrando cosas en relación a cómo están administrando su tiempo y energía. Es que la luna llena en Virgo, en el reflejo del Sol en Piscis, nos lleva mucho la atención a nuestro modo de ordenarnos. Y muy es muy posiblemente una invitación a un reordenamiento. Potenciada por los cuatro planetas en Capricornio, parece ser momento para organizar un poco los planes y objetivos para el año. Hay algo importante en relación a revisar cómo estás gestionando hoy tu energía. ¿Hay aspectos que quisieras incluir y hoy no estás encontrándoles el lugar? ¿Hay cosas que te estén llevando más tiempo y energía de lo deseado?
A veces es simplemente un tema de organización, parecen decir a los gritos todos estos planetas en signos de tierra. A veces no es tanto drama ni un verdadero problema más allá de: sentarte y hacer un círculo con cómo quisieras estar distribuyendo tus tiempos. Y hacer otro con cómo los estás distribuyendo hoy. ¿Se parecen?
Tanta tierra en el cielo nos regala la posibilidad de una mirada más objetiva en relación a la distribución de nuestra energía. A ver cuánto realmente hoy no puede formar parte, porque el día tiene 24 hrs, y cuánto dejamos afuera por cuestiones que son realmente modificables.
Además, el tránsito de Venus encontrándose con Urano en Tauro suma a esto un elemento: el placer. ¿Cuánto lugar está teniendo hoy el placer en tu vida? De algún modo, parece que el disfrute necesita también formar parte del camino.
De fondo, a pesar de que casi todos los planetas estén en signos de tierra, sigue el eco pisciano proponiéndonos un estar más sensible y receptivo. ¿En qué medida nuestra agenda contempla la sensibilidad y el imprevisto? ¿En qué medida nace del egoísmo al que muchas veces estamos condicionados, y en qué medida nace del amor? Como esta frase famosa y siempre actual del Don Juan de Castaneda nos dice: al final, todo camino lleva al mismo lugar: a ninguna parte. Por eso, lo único que importa a fin de cuentas es que tu camino sea un camino con corazón.
¡Les invitamos a contarnos cómo están viviendo estos tránsitos, viajerxs! Y acompañarnos en el viaje de existir.
Relaciones
El tránsito de Venus sobre Urano nos lleva a cuestionar nuestros modos de relacionarnos. Es un momento para revisar nuestros patrones vinculares. ¿Qué cosas seguís haciendo simplemente por una inercia a conservar lo conocido?
Es que tenemos una fuertísima tendencia a permanecer en el lugar conocido. Del otro lado está el abismo, lo desconocido. Sabemos que si siempre estamos pegadxs, hay una seguridad. Aunque sea muy incómodo y estemos necesitando distancia. También podemos saber que mantener la distancia, estar aisladxs, es seguro. Aunque podamos asumir en lo profundo de nuestro corazón la necesidad de una conexión íntima y profunda.
Hay estos días una fuerte necesidad de revisar estos patrones que se normalizan, en el camino de descubrir tu modo singular de relacionarte. Tanto la intimidad como la distancia pueden volverse un patrón. Sea cual sea, Venus-Urano seguro lo sacude. ¿Te das cuenta qué pide hoy tu vida?
Podés dejar que quien responda sea el cuerpo y no la mente, que es lo que piden estos dos planetas en Tauro. Bajar al cuerpo, y dejar que él mande. ¿Es tiempo de encuentro o retirada? Y luego, atreverte a correr el riesgo de ir hacia el abismo de lo desconocido en tu relacionarte.
En última instancia, vincularnos es un pulso de encuentro y retirada. Solo entonces puede haber un verdadero contacto.
¿Les suenan alguno de estos polos? ¿Se imaginan reconociendo la necesidad del polo opuesto?