Sos tan una figurita repetida. Tan predecible como la hora del ocaso. Enredade en tus problemas cotidianos. Todo tan igual, siempre tan igual.
¿Por qué no te acercás a mí? A esta locura, a esta diferencia. A esta posibilidad de desorbitar tus imágenes. De perder tus rumbos. Y cantarle al abismo sin nombre!
Justo ahí, donde algo ya te resulta conocido, dejar que se filtren las miles posibilidades de lo inexplorado. Abrir ese lugar y hacerlo estallar de infinita posibilidad.
Así habla Luna Llena en Acuario, que se alza en el cielo para iluminar la posibilidad de lo distinto. Para sacarnos de los automatismos en los que estamos inmersos.
¿Sos consciente de ese hábito que ya perdió su potencia? Ese, que se repite solo por la fuerza de la inercia – ¡fuerza poderosa, si las hay!
Luna Llena en Acuario nos invita a saborear lo distinto a lo habitual. A meternos de lleno en la incertidumbre. No importa si sos vos o es la vida, por algún lado viene un cambio. Una necesidad de que algo se desestabilice, de que algo pierda el rumbo.
¿Te animás a dejarte desarticular? Y explorar otros territorios.
Hacer de absolutamente cada posibilidad algo real. Absolutamente cada posibilidad. ¡Realmente todo! No descartar nada de antemano. ¿Hay alguna posibilidad que hayas descartado? ¿Será, tal vez, hora de devolvértela?
Eso que te parece una locura. Ese es el camino, dice Luna llena en Acuario. Ese es el camino para redescubrir tu posibilidad de una vida más plena. Más genuina. Más real. Menos cliché. Menos imagen que se repite siempre a sí misma.
Desorbitadas las ideas, desorbitados los caminos, desorbitadas las relaciones.
En medio de la tensión de todo este año de Saturno y Urano, de lo conocido y lo nuevo, de lo socialmente instaurado y lo que lo delira, Luna Llena en Acuario es la invitación a, por un rato, inclinarnos hacia el delirio.
O encontrarnos con todos esos temores que le tenemos a descontrolarnos, a enloquecernos, a dejar los ropajes de la sociedad y danzar desnudes en el tiempo del instante abierto.
Como dice la poeta tántrika del siglo XIV
¿Por qué, oh alma mía, te dejas embriagar por un vino que no es de tu cosecha?
¿Y por qué confundes error con verdad?
Carente de discernimiento, hete aquí fascinada por una ley extraña a ti.
Para recibir esta tormenta desarticulante, es importante hacer alguna práctica de enraizamiento. Raíces bien fuertes, para que podamos entregarnos al cambio, sabiendo que el apoyo en nosotres mismos está estable.
Escrito por Wem Marcos Wertheimer, consultor e investigador astrológico.
Y te invitamos a la próxima clase gratuita que compartiremos el día viernes 23 de julio, de 19 a 21 hrs por Zoom,
Tantra para todxs – honrarte justo como estás siendo Inscribite aquí